Autores del Robo de Documentos del FBI que Revelaron el Escándalo COINTELPRO en 1971 Dan la Cara por Primera Vez

NYT saca hoy una historia que pasará con seguridad al cine (aparte de un próximo documental). La historia coincide con la publicación de un libro que cuenta todos los detalles y revela las identidades de sus protagonistas.

A principios de los años 70 numerosos grupos antibélicos en Estados Unidos protestaban regularmente contra la Guerra de Vietnam, la cual duraba ya más de una década. Algunos activistas tenían la sospecha de que el FBI estaba realizando operaciones encubiertas para diluir y neutralizar la protesta. Un día uno de ellos, William C. Davidon, un profesor de física de Harvard, tuvo la idea de entar en unas oficinas auxiliares del FBI en Filadelfia para llevarse documentación que pudiera probar sus sospechas.

Keith Forsyth - Encargado de
forzar los cerrojos

Para ello propuso a un grupo de amigos activistas planear y ejecutar la operación. Eran ciudadanos corrientes: un profesor universiatrio, una trabajadora social, un taxista... (encargado de forzar las cerraduras). Durante semanas se dedicaron a elaborar un plan meticuloso: planos del edificio, turnos de vigilancia, entradas y salidas. Una chica del grupo se hizo pasar por una estudiante que investigaba oportunidades de trabajo para mujeres en el FBI para entrar al edificio y comprobar las medidas de seguridad que protegían los archivos.

Combate Ali vs Frazier en 1971

Un vez convencidos de que la operación era factible eligieron el momento idóneo: el día del combate de boxeo entre Mohamed Ali y Joe Frazier, el primero de marzo de 1971, cuando todos estaban pegados al televisor. Vestidos con trajes de ejecutivos entraron, llenaron sus maletines de documentos (cerca de 1000) y salieron sin problemas.

Despues de varios dias revisando la documentación se dieron cuenta de que lo que tenían en sus manos era pura dinamita, mucho más de lo que jamas hubieran podido imaginarse: un nivel de vigilancia encubierta que iba mucho mas allá del movimiento de protesta, abarcando incluso a senadores y diplomáticos. 

Destacaban algunas frases que describían estrategias como “reforzar la paranoia” de los grupos de protesta para hacerles creer que el FBI estaba “detras de cada buzón de correo”. Pero sobre todo un intento de chantaje al lider del Movimiento por los Derechos Civiles de los afroamercianos Martin Luther King para hacer que se suicidase.

Entre los documentos aparecía una misteriosa palabra que no llegaria de descifrarse hasta dos años despues: COINTELPRO = Programa de Contra Inteligencia. Se trataba de un amplio conjunto de técnicas de juego sucio puestas en práctica por agentes infiltrados en grupos disidentes, o de algun modo considerados peligrosos por el sistema, con el objetivo de “diluir, confundir, desacreditar, desbaratar, desmoralizar, neutralizar, sabotear…” Hay un buen artículo COINTELPRO en la Wikipedia.

Betty Medsger

El grupo de cacos activistas decidió entregar copias de los documentos a Washington Post. En Concreto a Betty Medsger, autora del libro que sale ahora. El FBI se puso en contacto con el Post para intentar detener la publicación de los documentos, alegando que podrian “”poner en peligro la vida de personas”, como siempre... El Post lo sacó en portada.

El FBI dedicó cerca de 200 agentes a cazar a los cacos. La única pista que tenían era la chica que entró haciendose pasar por una estudiante. “¡Traiganme a esa mujer! dijo Edgar G. Hoover, el sinistestro director del FBI, según cuenta la mujer en cuestión, Bonnie Raines. Por entonces había miles de activistas muy actuvos que coincidían con su descripción. Al final se cerró el caso con una lista definitiva de 7 posibles autores del robo. Sólo acertaron con uno.

Desde entonces COINTELPRO ha pasado a ser un término para designar todo tipo de maniobras sucias por parte de servicios de inteligencia y otros grupos para quienes la ley y los derechos civiles no son más que obstáculos para sus intereses. Un ejemplo son los “revienta manifestaciones” del 15M, etc.

John y Bonnie Raines

Cabe considerar estos hechos, junto con los "papeles del pentagono" filtrados por Daniel Ellsberg el mismo año, 1971,  los precursores de la tradición "whistleblower" de la "seguridad" nacional estadounidense: Manning, Kiriakou, Drake, Binney, Hammond, Snowden y muchos mas que aun estan por llegar, por mucho que se castigue su ejemplo.

Cuatro puntos que destaca Greenwald sobre esta historia:

1. Ahora estos cacos serán tomados como héroes y ejemplo de las gloriosas libertades usanas, unicamente porque estan lejanos en el tiempo. No se les acusará de "robar documentos que no les pertenecían", que "dañaron la seguridad nacional", que "no se llevaron unos poco sino lotes enteros" de documentos, que "pusieron en peligro la vida de las personas", tal y como se hace ahora con Snowden

2. Que COINTELPRO nunca murió, como se hizo pensar, sino que aun vive, solo que con otros nombres, eufemismos como "imputaciones anticipatorias". Los objetivos suelen ser musulmanes pero tambien muchos activistas. 

3. Washington Post publicó la historia (después de mucho debate interno) pero otros periódicos no. New York Times sacó algo pero uno de sus periodistas decidió entregar despues los documentos al FBI. Los Angeles Times tampoco publicó y se supone que también entregó sus copias al FBI.

4. Los paralelismos con Snowden e incluso Manning son obvios. La autora del libro, Mesdger, dice que espera que "contribuya al debate iniciado por Snowden", y "ya hemos estado ahí".

Y como broche de oro final dice:

"Encontramos aquí un nuevo ejemplo del principio vital, tan a menudo pasado por alto: aquellos considerados "delincuentes" por una sociedad injusta a menudo resultan ser sus más nobles actores."

 ¿Y qué hizo delinquir a estos activistas antibélicos?

Como dice Keith Forsyth en el vídeo del artículo en NYT: "Ir por ahí con pancartas ya no hacía mucho. Era el momento de ir un poco mas allá"

Lo cual es casi exactamente lo que dijo Jeremy Hammond en su declaración/confesión ante el juez antes de ser condenado a 10 años en prisión por hackear los emails de la empresa privada de inteligencia Startfor y enviarlos a Wikileaks: 

"¿Podría haber conseguido los mismos objetivos con medios legales? He probado de todo, desde peticiones de votos a protestas pacíficas y me he encontrado con que los poderosos no quieren que se exponga la verdad. Cuando hablamos la verdad al poder somos ignorados en el mejor de los casos o brutalmente reprimidos en el peor."

Hammond fue cazado por un hacker vendido al FBI, el cual dirigió a Hammond a cometer delitos para poder cazarle: tipica operación sucia COINTELPRO.

ps. elpais.com directamente tradujo el artículo del NYT 

Aqui una maravillosa sesión de los protas con Amy Goodman & cia de Democracy Now (a ver si sale pronto una traducción): 

Curiosamente, DNow ha extraido la misma idea para el título de su entrevista ("era el momento de hacer algo más que protestar") que yo para anunciar este artículo en twitter:

"Las manifestaciones y pancartas ya no hacían mucho. Era momento de ir un poco mas allá" = delinquir http://t.co/EeTt7tpvyK #COINTELPRO
— Sixto López (@sixtolz) enero 8, 2014

 Estamos en sintonía... :-D